¿Te preguntas por qué la chispa en tu vida íntima se ha apagado? ¿Sientes que las relaciones sexuales con tu esposo se han vuelto rutinarias o, peor aún, indiferentes?
No estás sola.
Sofía y Miguel llevan casados cinco años. Tienen dos hijos pequeños y carreras demandantes. Aunque se aman profundamente, Sofía ha notado un cambio preocupante: ya no siente la misma excitación ni el mismo placer durante el sexo. Las noches que antes estaban llenas de pasión ahora parecen ser solo una tarea más en su lista de quehaceres.
Se pregunta: «¿Por qué no siento nada al tener relaciones con mi esposo? ¿Es esto normal? ¿Qué puedo hacer para recuperar la pasión?»
Esta situación es más común de lo que imaginas. Muchas mujeres experimentan una disminución del deseo sexual en alguna etapa de su matrimonio.
Vamos a descubrir las causas de esta falta de sensaciones durante el sexo, y basándonos en nuestra experiencia como terapeutas y en conocimientos de expertos, compartiremos contigo estrategias y soluciones para recuperar la pasión y la conexión en tu matrimonio.
La pérdida de sensaciones: un fenómeno multifacético
Para entender esta falta de sensaciones, es fundamental considerar tanto los factores físicos como los psicológicos y emocionales:
a) Factores físicos
– Cambios hormonales: el ciclo menstrual, el embarazo, la lactancia y la menopausia pueden alterar los niveles hormonales y afectar el deseo sexual.
– Fatiga crónica: la fatiga crónica puede reducir significativamente la energía y el deseo sexual, haciendo que la experiencia sexual sea menos placentera.
– Efectos secundarios de medicamentos: Algunos medicamentos pueden tener efectos secundarios que reducen la libido.
Consejo práctico: Programa un chequeo médico completo para descartar causas físicas. Considera llevar un registro de tu ciclo menstrual (existen aplicaciones que puedes usar en tu teléfono móvil como “Flo Health” https://app.flo.health/)y cómo afecta tu deseo sexual.
b) Factores psicológicos y emocionales
– Estrés y ansiedad: las responsabilidades diarias, el trabajo, los hijos y las preocupaciones pueden agotar tu energía y disminuir tu libido.
– Depresión: y otros problemas de salud mental, pueden afectar significativamente el deseo sexual.
– Problemas de imagen corporal: si te sientes incómoda o insegura con tu propio cuerpo, es probable que experimentes dificultades para disfrutar plenamente de las relaciones sexuales.
Consejo práctico: Considera llevar un diario emocional para identificar patrones en tu estado de ánimo y su relación con tu vida íntima. Practica la autocompasión y el autocuidado regularmente. Tómate 5 minutos al día para hacer una pausa y realizar una respiración consciente. Coloca una mano sobre tu corazón y repite mentalmente: “Debo ser amable conmigo misma en este momento. Todos cometemos errores y enfrentamos dificultades. Me acepto tal como soy.»
¿Por qué no siento nada? Posibles razones
La falta de sensaciones durante la intimidad puede tener múltiples orígenes:
– Rutina y monotonía: La familiaridad puede disminuir la excitación.
– Falta de conexión emocional: La intimidad emocional afecta la física.
– Expectativas no cumplidas: La realidad no coincide con nuestras fantasías.
– Resentimiento acumulado: Los problemas no resueltos afectan la intimidad.
– Trauma pasado: Experiencias negativas pueden bloquear las sensaciones.
Consejo práctico: Habla con tu pareja sobre tus sentimientos. Podrías decir: «He notado que últimamente me cuesta conectar durante nuestros momentos íntimos. Me gustaría explorar juntos qué podría estar pasando.» Considera establecer una «noche de cita» semanal para reconectar emocionalmente.
El papel de la ansiedad y el estrés
Como señala Michelle Weiner-Davis en su libro «Felizmente casados, sexualmente felices», el estrés y la ansiedad pueden tener un impacto significativo en nuestra capacidad para sentir placer y conexión durante la intimidad.
Los factores que pueden estar incidiendo en esto, son:
– Desconexión corporal: El estrés puede hacernos «desconectar» de nuestras sensaciones físicas.
– Pensamientos intrusivos: La ansiedad puede llenarnos de preocupaciones que nos distraen del momento presente.
– Tensión muscular: El estrés crónico puede causar tensión física que dificulta la relajación necesaria para el placer sexual.
Biológicamente, el estrés crónico aumenta los niveles de cortisol, que puede interferir con la producción de hormonas sexuales como el estrógeno y la testosterona, afectando directamente el deseo y la respuesta sexual.
Consejo práctico: Incorpora técnicas de mindfulness en tu rutina diaria y antes de los encuentros íntimos para ayudarte a estar más presente en el momento. Encuentra un lugar tranquilo, siéntate o recuéstate, relaja tu cuerpo, cierra los ojos y enfócate en tu respiración. Inhala profundamente, respira lentamente por la nariz y llena tus pulmones completamente. Exhala lentamente por la boca y deja ir toda la tensión. Mantén tu atención en el ritmo de tu respiración. Si tu mente divaga, suavemente vuelve a centrarte en tu respiración.
Estrategias para reconectar
En nuestro trabajo diario como terapeutas de parejas, enfatizamos la importancia de la comunicación y la exploración en la intimidad y sugerimos a nuestros pacientes las siguientes técnicas:
– Practica la comunicación abierta: sobre tus deseos y necesidades.
– Explora nuevas formas de intimidad: no necesariamente sexuales. Una cena romántica, ir juntos de vacaciones y desconectar, etc.
– Establece tiempo de calidad: fuera del dormitorio para fortalecer la conexión emocional.
– Realiza ejercicios de «tocar y ser tocado»: para aumentar la conciencia sensorial, sin la presión de llegar al acto sexual. Comienza con un masaje suave o acariciándose mutuamente durante 15 minutos, concentrándose en las sensaciones.
La Importancia del Autoconocimiento
El autoconocimiento y la autoexploración son fundamentales para una vida sexual satisfactoria. Conocer tu propio cuerpo, tus deseos y tus respuestas puede ayudarte a comunicar mejor tus necesidades a tu pareja.
Consejo práctico: Dedica tiempo a la autoexploración. Observa cómo responde tu cuerpo a diferentes tipos de estimulación. Esto puede ayudarte a guiar mejor a tu pareja durante la intimidad.
La Influencia del Pasado
Nuestras experiencias pasadas pueden tener un impacto significativo en nuestra vida sexual actual:
– Traumas Pasados: experiencias traumáticas, como abuso sexual o relaciones previas conflictivas, pueden afectar la respuesta sexual. Si has tenido experiencias traumáticas, busca el apoyo de un terapeuta especializado, puede ser crucial para tu recuperación y bienestar sexual.
Cuándo buscar ayuda profesional
Si la falta de sensaciones persiste y está afectando tu relación, puede ser útil buscar la ayuda de un terapeuta de pareja o un sexólogo.
Algunas señales de que podrías beneficiarte de la terapia incluyen:
– Evitas constantemente la intimidad.
– Tienes sentimientos de culpa o resentimiento relacionados con el sexo.
– Comunicación rota sobre temas sexuales.
Podemos ayudarte. Escríbenos y te derivamos con unosde nuestros especialistas en terapia sexual y de pareja.
Conclusión
La falta de sensaciones durante la intimidad puede ser desconcertante y preocupante, pero es un problema que se puede abordar. Comprender las posibles causas y trabajar juntos en estrategias para reconectar puede ayudar a revitalizar tu vida íntima.
Te animamos a que uses la información de este artículo como punto de partida para tener conversaciones honestas con tu pareja sobre tu intimidad. Recuerda, cada relación es única, y lo más importante es encontrar lo que funciona para ambos.
No esperes más para actuar. Da el primer paso hoy mismo: habla con tu pareja, programa una cita con un profesional, o simplemente dedica un momento a la autoexploración. Tu bienestar sexual es importante y merece atención.
Preguntas frecuentes
¿Es normal no sentir nada durante las relaciones sexuales?
Aunque no es infrecuente, no es una situación «normal» y generalmente indica que hay algún problema que necesita atención.
¿Puede la falta de sensaciones ser un signo de que ya no amo a mi pareja?
No necesariamente. Hay muchas razones por las que puedes experimentar una falta de sensaciones que no están relacionadas con tus sentimientos hacia tu pareja.
¿Cómo puedo hablar con mi pareja sobre este problema sin herirle?
Sé honesta pero amable. Enfócate en tus sentimientos y experiencias, no en culpar a tu pareja.
¿Pueden los problemas hormonales causar falta de sensaciones?
Sí, los desequilibrios hormonales pueden afectar significativamente la libido y las sensaciones durante el sexo.
¿Cuánto tiempo debería esperar antes de buscar ayuda profesional?
Si el problema persiste durante varios meses y está afectando tu relación, es un buen momento para considerar la ayuda profesional.