¿Cuándo buscar ayuda?
Estás en la cocina, otra vez con esa sensación en el estómago. Acaban de tener la tercera pelea de la semana y ni siquiera es jueves. Te preguntas si esto es lo que significa estar en pareja o si las peleas constantes con tu pareja son un signo de problemas más profundos.
«¿Es normal pelear con mi pareja tanto?», te cuestionas mientras recoges los platos que dejaste a medias cuando comenzó la discusión.
No estás solo en esta duda.
En mis 18 años como terapeuta de parejas, esta pregunta aparece constantemente.
Todas las parejas discuten, pero las peleas constantes en pareja pueden ser señal de problemas en la relación que requieren atención.
Las personas llegan a mi consulta con la misma expresión de preocupación: «Discutimos demasiado… ¿Cuándo debería buscar ayuda para mi pareja y para mí?»
La verdad es que el número de peleas no es lo que determina si una relación está en problemas. Lo que importa es cómo pelean y cómo se sienten después.
Por qué nos asusta tanto discutir
¿Por qué nos preocupa tanto pelear con nuestra pareja constantemente?
Crecimos con modelos confusos. Algunos vieron a sus padres en guerra constante; otros nunca los vieron discutir. Ninguno de estos extremos enseña cómo manejar conflictos sanamente.
Tenemos miedo al abandono: «Si seguimos así, me dejará».
Este temor primitivo hace que cada discusión se sienta como una amenaza a la supervivencia de la relación.
Nos comparamos con parejas idealizadas. Vemos en redes sociales a otras parejas que parecen no discutir nunca y pensamos que algo anda mal con nosotros.
Lo que no vemos es lo que ocurre cuando están solos.
Confundimos amor con ausencia de conflicto. Muchos crecimos con la idea de que «si hay amor, todo es fácil». Esta fantasía nos deja sin herramientas cuando surgen inevitables desacuerdos.
Y todo esto genera ansiedad cada vez que surge un desacuerdo.
Evitación de temas importantes para «no pelear».
Resentimiento acumulado que estalla en peleas constantes en pareja.
Sensación de fracaso como pareja y dudas sobre cuándo buscar ayuda profesional.
La verdad sobre las peleas en pareja: lo normal vs. lo problemático
Después de trabajar con cientos de parejas, he aprendido a distinguir entre las discusiones normales y saludables, y aquellas que son señal de alerta y serios problemas de relación.
No se trata de si pelean o no. Todas las parejas lo hacen. Se trata de identificar cuándo pelear con tu pareja se ha convertido en algo tóxico que daña el vínculo.
8 señales que indican que tus peleas NO son normales
A continuación te comparto cómo diferenciar entre discusiones normales y peleas constantes en pareja que indican que necesitan ayuda:
1. Las discusiones escalan rápidamente hasta gritos
Una cosa es levantar la voz ocasionalmente y otra muy distinta es que casi todas las discusiones terminen en gritos. Si pasan de 0 a 100 en segundos, están perdiendo la capacidad de regularse emocionalmente juntos.
Las parejas saludables pueden sentir enojo sin dejarse arrastrar por él completamente.
2. Recurren al desprecio y los insultos
Hay una gran diferencia entre «Estoy molesto porque no sacaste la basura» y «Eres un irresponsable que nunca hace nada en esta casa».
El desprecio (miradas de asco, burlas, insultos) es lo que el investigador John Gottman llama «el mayor predictor de divorcio». No es el desacuerdo lo que daña, sino el irrespeto.
3. Tienen las mismas peleas una y otra vez
Si pelear con tu pareja significa discutir siempre por lo mismo sin llegar nunca a soluciones, están atrapados en un patrón. Las parejas saludables también tienen temas recurrentes, pero pueden ver algún progreso a lo largo del tiempo.
Cuando la misma discusión ocurre como un disco rayado, hay problemas de relación más profundos sin resolver.
4. Usan el pasado como arma
«La semana pasada hiciste lo mismo» o «Siempre has sido así» son frases que indican que están acumulando agravios sin procesarlos realmente.
Las parejas saludables se centran en el problema actual sin traer toda la historia de errores pasados.
5. Evitan discutir a toda costa
Puede sonar contradictorio, pero la ausencia total de discusiones también es preocupante. Significa que están priorizando una falsa paz sobre la honestidad.
El silencio puede indicar que han dejado de invertir emocionalmente en la relación o que el miedo al conflicto es mayor que el deseo de resolver problemas.
6. No hay reparación después de las peleas en pareja
Todas las parejas discuten, pero las saludables saben cómo reconectar después. Si terminan una pelea y siguen distantes por días, sin gestos de reconciliación, la herida se profundiza.
La falta de «rituales de reparación» (pedir perdón, un abrazo, humor compartido) es una señal de alarma.
7. Te sientes caminando sobre cáscaras de huevo
Si vives con miedo constante a provocar la próxima discusión, tu sistema nervioso está en alerta permanente. Esta tensión crónica es insostenible y afecta tu salud física y mental.
Las parejas saludables sienten seguridad incluso cuando saben que podrían surgir desacuerdos.
8. Las discusiones afectan otras áreas de tu vida
Cuando las peleas con tu pareja impactan tu trabajo, tus amistades o tu bienestar general, han cruzado una línea importante.
Si te descubres llorando en el baño del trabajo o incapaz de concentrarte en otras actividades debido a los conflictos, es momento de buscar ayuda.
Cuándo y cómo buscar ayuda profesional
Si identificaste tres o más de estas señales, probablemente sea el momento de buscar ayuda para tu pareja y para ti. Esto no significa que la relación esté condenada, sino que necesitan nuevas herramientas para manejar los problemas de relación existentes.
La terapia de pareja no es solo para relaciones al borde del colapso. De hecho, funciona mejor cuando acuden antes de que las peleas constantes en pareja hayan causado daños irreparables.
El terapeuta adecuado puede:
- Identificar los patrones destructivos que no pueden ver por sí mismos.
- Enseñarles técnicas específicas para discutir de manera productiva.
- Crear un espacio seguro para abordar temas difíciles.
- Ayudarles a sanar heridas emocionales que alimentan los conflictos
Si tu pareja se resiste a la idea de terapia, puedes comenzar yendo solo o sola.
A veces, el cambio en uno de los miembros rompe el patrón disfuncional.
Conclusión: Las peleas en pareja saludables existen
Pelear con tu pareja ocasionalmente no es señal automática de que algo anda mal. Las parejas más felices y duraderas también tienen desacuerdos, pero saben cómo navegar a través de ellos sin que se conviertan en problemas de relación serios.
La diferencia está en cómo discuten, no en si lo hacen o no.
Aprender a pelear «bien» es una de las habilidades más valiosas que pueden desarrollar juntos. Significa expresar desacuerdos con respeto, escuchar activamente aunque estén molestos, y buscar soluciones en lugar de «ganar» la discusión.
Si las peleas constantes en pareja han cruzado la línea hacia lo tóxico, recuerda que saber cuándo buscar ayuda para tu pareja no es señal de fracaso, sino de compromiso.
Demuestra que valoras suficiente la relación como para invertir en mejorarla.
¿El primer paso?
Comparte este artículo con tu pareja y pregúntale: «¿Crees que nuestras discusiones son saludables o nos vendría bien algo de ayuda para comunicarnos mejor y resolver nuestros problemas de relación?»
Esta conversación, por sí sola, podría ser el comienzo de un patrón más sano.
Y si deseas una terapia de pareja (https://terapiapsicologicalima.com/terapias-psicologicas/terapia-de-pareja/), contamos con especialistas que pueden ayudarte.
Las discusiones con mi novio son cada vez mas seguidas, trato de ceder para que paren, pero al mismo tiempo creo que no es justo y que llegara un momento en que no habra reconciliacion con el, ya no se que hacer.
Hola Maribel,
Ceder en cosas pequeñas es parte de llevar una relación de pareja sana, sin embargo cuando esto se vuelve una constante la sensación de frustración o injusticia nos puede hacer sentir cada vez mas distantes y agotados. Discutir en pareja es saludable, sobre todo cuando lleva a la comunicación y el entendimiento, a diferencia de si pelean todo el tiempo y no llegan a acuerdos o soluciones. Es importante que puedas comunicar como te sientes para que no lo hagas ya desde el agotamiento total que es previo a una ruptura. En terapia de parejas veo a muchas personas que se han guardado todo por años hasta que es muy tarde. Un abrazo